ALQUIMIA, UN CAMINO DE AUTOTRANSFORMACION:

Por medio de un gradual y profundo autonocimiento y comprensión de la vida, así como de otros conocimientos y herramientas, irás descubriendo tu grandeza y dejarás atrás tanto de tu dolor que un día dirás que ese del pasado no pudiste ser tú!

lunes, 4 de mayo de 2020

YO - YO - YO!!!

Se acabaron los tiempos de del yo-yo.
Yo me salvo solo, yo tengo la razón, yo exijo y no doy, yo someto, yo violento.

Dar el paso hacia "tener la voluntad" de aportar a una forma de relacionarnos diferente, requiere mucho coraje. Más coraje que seguir siendo gobernados por los mismos odios dentro de cada uno y afuera, en el mundo exterior.

La soberbia y la negación a lo anterior, sólo te puede traer destrucción.



NUEVA NORMALIDAD? (Después del COVID19)


Para hablar de todo lo que actualmente está viviendo la humanidad –como género- tienes miles y miles de canales. Puedes identificarte con una tendencia y recibirás más y más información que te confirme eso, lo que tú ves, con lo que tú te sientes identificado y con lo que vibras. Miles y miles de seres humanos sumándose a una conciencia colectiva, ya sea de un lado o de otro y todos sintiendo que están en lo correcto, que lo suyo es lo que mejor y más se acerca a la verdad que todos los demás debieran aceptar, de lo contrario, que se mueran.

La verdad es que todos los bandos están tan atrincherados en sus obtusas posiciones, defendiéndose, protegiéndose (no vaya a ser cosa que le demuestren que está equivocado y, si no equivocado, obsoleto) que están dejando pasar como nada estas poderosas circunstancias de cambio, tratando de tapar el sol con un dedo, parchando las situaciones con los mismos trapos roídos.

Esta pandemia (sea cual sea su origen real) es  el escenario perfecto para ver muchísimas cosas, también lo es  para desafiarnos a entender que las cosas, así como estaban, no están bien. Claro, todos lo sabíamos pero no habíamos sido obligados de tal forma a asumirlo como lo estamos ahora. Ya no nos conformamos, ya no queremos volver a esa “normalidad”…
Mientras tanto, sólo veo en las redes posteos de gente que se queja del encierro, de lo mal que la están pasando, obligados a convivir con el otro de una forma que quizás nunca habían experimentado porque siempre estaba la excusa del trabajo y de tantas cosas, no?
Quejas porque no saben ser padres o parejas o lo que sea. La convivencia forzada ha puesto sobre la mesa situaciones por años escondidas, ánimos y sentimientos nunca enfrentados ni asumidos.
Y otros, queriendo pasar por alto la contingencia, exigiendo que todo vuelva a la normalidad de antes para que nadie olvide cuál es el orden al que deben someterse; y otros aún, que presionan e insisten en que el odio y la violencia es el camino que no abandonarán.

Es entonces cuando yo te pregunto a ti: Cómo quieres que sea la vuelta a la rutina?
Vas a extrañar el tiempo que pasaste con los tuyos o sentirás el alivio de no verlos tanto?

Crees que volverás a ser el mismo de antes?
Pero si crees que sigues siendo el mismo de antes, cómo puede ser que quieras que la normalidad de antes ya no sea la normalidad de ahora?

Es que quieres que las cosas cambien sin que cambies tú?

Quieres que todo se mueva a tu favor, pero…cuál será tu aporte?

De qué manera vas a gestar dentro de ti algún cambio que promueva y aporte a ese cambio en el mundo con el que tanto te abanderas?

Porque, digámoslo, es fácil exigirles a los otros…

Cuál va a ser tu aporte?

Vas a seguir siendo gobernado por la violencia y la codicia, el odio, la ira, el egoísmo, el abuso hacia los demás?

Todavía no te das cuenta de que no sacas nada con creer que te salvas solo, que de pronto viene un miserable “algo” que te deja claro que nadie se salva solo y que tanto le toca a los otros como a tí?
Todavía no te das cuenta de que el futuro debe ser de empatía hacia los otros, de justicia, de acuerdos en paz!

Si aún no se expande tu entendimiento, si aún no se expande tu corazón, entonces hazlo al menos por conveniencia –por último-. Todos vamos en el mismo barco, aquellos de los que abusas hoy, aquellos a los que violentas hoy…aquellos a los saqueas hoy…podrían ser los únicos que te den la mano cuando el mundo de otra vuelta mostrando que llegó el momento de no sólo exigir cambios al mundo de los otros, sino también en nosotros mismos. 

No hagas caso a lo que digo, tienes el derecho, pero si no me haces caso a mi o a otros que te lo digan, la vida te lo va a mostrar de nuevo, en algún momento.

Bárbara Belmar Menanteau