“I see you” era el saludo que usaban en la película “Avatar”,
un saludo similar a “Namasté” o “Namaskar”, con él se reconoce y se honra la
presencia de un “otro”, más allá de eso, se reconoce la presencia de lo Divino
en ese otro y la unidad en el Todo. Este saludo y reconocimiento era usado
incluso para honrar al animal muerto por la mano del hombre, cuando tomaba su
vida para el sustento “justo y necesario”
de la aldea.
“I see you” no sólo para cada ser de la misma raza o especie sino “i see you”
para cada creación de la Gran Conciencia, la conciencia del Absoluto, y en
último caso nuestra propia conciencia.
A propósito de cierta inquietud acerca de la opción de
alimentarse o no de carne de animal he creído apropiado profundizar un poco en
el tema.
Siempre fui carnívora y mucho...gozaba
con el aroma de una carne a la parrilla, una cazuela de cerdo o de vaca y decía
que nunca jamás podría comer sólo vegetales. Cierta vez, un profesor de yoga me
dijo que sabía que yo comía carne porque “olía a cadáver” y, por supuesto, me indigné con él!! No sabía a dónde la vida y el camino espiritual
me traerían, lugar que nunca pensé llegaría y que jamás me propuse!!
Primero
comencé a sentir que la digestión se me hacía aún más difícil cada vez que
comía carne....luego, ver los trozos de carne en las carnicerías me producía
una especie de vergüenza por la crueldad de la exposición de trozos de “cadáver”....
luego sentí que yo realmente olía distinto cuando comía carne; siguió una
profunda compasión por ellos, los animales que son menú....
Hoy soy vegetariana
y me siento mucho más liviana de cuerpo y....corazón....
Les aseguro que no hay pose, ni hay auto
imposición...sólo hay amor.....
Como saben, nuestro verdadero alimento es el Sol, es el
Prana…. el alimento proveniente de vegetales y animales comenzó a ser necesario
cuando la humanidad perdió su conexión Divina hasta límites insospechados y dejó de alimentarse de sol y de prana,
entonces comenzó a alimentarse de otros seres que toman la luz y el prana de
forma natural y aparentemente inconsciente.
Investigaciones hay por doquier de personas que
nutriéndose de sólo dos o tres clases diferentes de alimento logran, sin
embargo, obtener todos los elementos químicos, minerales y energéticos que el
cuerpo humano necesita. Otros estudios han arrojado resultados sorprendentes en
el ámbito de la nutrición de seres humanos que han elegido volver a alimentarse de sol y prana, estilos de vida que se podrían calificar como alarmantes debido a los rigurosos estados de
privación de alimento que, pese a cualquier duda, mantienen intactas sus capacidades corporales y
estado de salud (Respiracionismo y Sun Gazing).
Sí, los seres humanos nos alimentamos de Luz, de Prana y
cuando no somos capaces de tomar esta fuente de vida directamente, la tomamos a
través de otros seres que ya la han usado y procesado, ellos son los animales y
los seres del reino vegetal. Que tengan todos ellos ciertos químicos,
vitaminas, minerales y energías que también necesitamos es tan sólo parte de la
misma verdad.
¿Qué pasa entonces cuando todo nuestro ser comienza a
impulsarnos a no comer carne animal?
Alguien dijo: “Yo no como nada que tenga ojos” “No puedo comerme a los animales porque ellos sienten”
Y yo pregunto: ¿Acaso no sabes que los seres del reino
vegetal también sienten? No tienen ojos, pero ven de una manera distinta.
No puedes soportar el sufrimiento de un animal en los
criaderos y mataderos, pero yo te digo que si pudieras escuchar el gemido de
una planta (árbol, lechuga, tomate…) cuando siente que lo vas a cortar tampoco
lo comerías.
Amigos, vegetales y animales están aquí no sólo para
hacernos compañía como hermanos, ellos están aquí porque en la fuente de la
creación ellos son y están también para alimentar a unos seres humanos carentes
de conciencia, pobres en conexión espiritual y llenos de una necesidad de
violencia que responde a un miedo ancestral de NO SER.
Si eres carnívoro,
lo menos que podrías hacer es honrar al
animal que te alimenta.
Si eres dueño de criaderos, lo menos que puedes hacer es
tratarlos con un mínimo de dignidad, honrarlos tanto como tu conciencia te lo
permita.
No es “pecado” comer carne y no se trata de ser más o ser
menos espirituales, ni más avanzados o menos avanzados. ¿Saben de qué se
trata? Se trata de ser conscientes de
por qué lo haces y de qué es lo que de verdad TÚ necesitas. También se trata de ir mirando lo que tu alma
te va sugiriendo en torno al Ser Uno con el Todo, al amor, a quien eres tú y de
qué estás hecho.
Comer carne genera más toxinas en la digestión y la hace
más lenta y por eso mismo comer carne
hace que tu vibración sea más baja, te hace más denso. Entonces, qué necesitas
tú?
Eres como yo era y dices “Adoro la carne, es deliciosa,
nutritiva y jamás la dejaré” ? Entonces, come carne.
Tienes una cierta intensión de dejar de comer carne pero
sufres cada vez que tus vecinos tiran un asado a la parrilla? Entonces, come carne hasta que notes que eso
disminuye y come sin culpa.
Andas siempre por otras dimensiones, te cuesta “bajar” y
hacer una vida normal porque te estás poniendo demasiado “sutil” para este
mundo y no practicas ningún tipo de ejercicio espiritual y/o físico que te
ayude a estar anclado acá? Entonces,
come carne.
Acepten sus procesos sin culpa y sin temor, nadie los está juzgando
y, si alguien lo hace es sólo por incomprensión, no por maldad. Cada cosa a su
tiempo, para quienes juzgan, para ti. Todos vamos de “Regreso a casa” (Lee
Carroll).
En este libro que cito (Regreso a casa, de Lee Carroll), un pequeño libro inspirado por Kryon, puedes ver de qué manera cambia nuestra forma de alimentarnos y procesar los alimentos en la medida que vamos reconectando con nuestra verdadera escencia.
No te presiones y sólo observa tu proceso con amor. Un
día te sorprenderás de cómo has cambiado…en
todo….
Bárbara A Belmar Menanteau (c)
Nota: La gran pregunta acerca de por qué, si nos alimentamos de Prana y Luz, millones
de personas mueren en el mundo por hambre tiene una respuesta que va más allá
de la ingesta de alimentos físicos y tiene relación con experiencias del alma,
residuos kármicos, denuncia de ciertas realidades para remover las conciencias, etc. Eso no es
tema de este escrito.
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